Se realizó un taller lúdico de educación ambiental con niños y niñas del barrio La Cruz, enfocado en reciclaje, separación en la fuente y reutilización creativa. La actividad, diseñada pedagógicamente para su rango de edad, combinó juego, historias y ejercicios de clasificación para fortalecer hábitos sostenibles en el hogar y la escuela. Desde la perspectiva climática, contribuye a la mitigación al reducir la fracción de residuos que llega a disposición final y a la economía circular al fomentar el reuso.
Impacto inmediato: 14 participantes comprendieron la ruta correcta de separación (aprovechables, orgánicos y no aprovechables), elaboraron un compromiso familiar de reciclaje y dejaron instalado un punto demostrativo de clasificación en el espacio del taller.



