El trabajo voluntario, además de ser uno de los Principios Fundamentales del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, es el motor que impulsa a la organización. Es gracias a la labor de los voluntarios que la Cruz Roja tiene la capacidad de ayudar a miles de personas año con año. La importancia que tienen los voluntarios para la organización es fundamental y esencial, y es por esta razón que se debe trabajar para fortalecer nuestra base voluntaria día a día y que esta crezca de forma apropiada, adaptándose a los nuevos desafíos que se presentan en nuestras sociedades.
Dicho lo anterior, se considera necesario realizar un diagnóstico de la situación del voluntariado y la juventud de las Sociedades Nacionales de forma continua, con el fin de que los resultados se puedan utilizar en el desarrollo de estrategias para el fortalecimiento y desarrollo adecuado de nuestros voluntarios y de los servicios voluntarios que ofrecemos a las comunidades en nuestro accionar humanitario.
El presente estudio es la continuación del capítulo 5. Resultados de los estudios base 2013-2015 incluido en el “Análisis de Voluntariado y juventud en América” elaborado por la Unidad de Desarrollo del Voluntariado y Juventud para las Américas, publicado en el año 2016. Dicho capítulo se llevó a cabo a partir de los datos recopilados en los años 2013-2015. También, se presentan los resultados basados en las encuestas del estudio de línea base de los años 2016, 2017 y 2018 como una continuación a los estudios anteriores.
Es importante aclarar que la participación de las Sociedades Nacionales en las encuestas no ha sido constante, por lo que hay un sesgo en los resultados debido a una mayor o menor participación dependiendo del año por cada país. Sin embargo, en el encabezado de cada apartado (tanto en el de Voluntariado como en el de Juventud) se aclara cuántas y cuales Sociedades Nacionales fueron incluidas en cada año.
La encuesta fue enviada a los puntos focales de Voluntariado y de Juventud de cada Sociedad Nacional por correo electrónico en enero de 2019. En los años 2013 y 2014 se utilizó Microsoft Excel para la recolección de la información, y para los resultados a partir del año 2015 se utilizó la plataforma SurveyMonkey. Algunas preguntas fueron agregadas a los instrumentos de los años 2015, 2016, 2017 y 2018, por lo que para algunas preguntas sólo se cuentan con los datos de esos años.
La adaptación a un escenario cambiante presenta grandes desafíos para las Sociedades Nacionales y las direcciones de voluntariado y juventud. Estos desafíos no se presentan solamente en la elaboración de programas y proyectos para la atención de personas en situación de vulnerabilidad, sino en la captación de los voluntarios para atender estas necesidades.
Los desafíos y retos de organizaciones sociales que utilizan como base de sus operaciones a voluntarios, aunado a una falta de planificación en la gestión del voluntariado en las Sociedades Nacionales ha llevado, en el mejor de los casos, a un estancamiento del número de voluntarios o a una contracción, según análisis más pesimistas. Esta reducción o estancamiento en el cuerpo de voluntariado es una llamada de atención a las Sociedades Nacionales y lleva a la reflexión sobre las estrategias de atracción y mantenimiento de los voluntarios.
Sin embargo, el desafío no está en captar la mayor cantidad de voluntarios posibles, sino en garantizar un cuerpo de voluntariado calificado para el desempeño de las actividades humanitarias. Esto se logra mediante la creación de perfiles de voluntariado y descripciones del trabajo que se desea que realicen con el fin de facilitar la captación de voluntarios idóneos para la labor humanitaria.
El involucramiento de los voluntarios en los procesos de toma de decisiones es fundamental para que los programas y proyectos se implementen de manera efectiva y para mantener la relevancia en un contexto nacional e internacional dinámico. La fortaleza del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja radica en su red de voluntarios, en los conocimientos que ellos aportan de las comunidades y en su capacidad de representar a las poblaciones vulnerables y público meta de los proyectos comunitarios. Sobre esta afirmación, se hace imprescindible trasladar esta representación a los niveles de toma de decisiones de la organización. La participación política de los voluntarios en la vida institucional de las Sociedades Nacionales es baja. Dos factores pueden explicar este fenómeno: un marco legal institucional que no posee mecanismos para este propósito y la ausencia de una cultura de participación.
Una de las principales preocupaciones desde las Sociedades Nacionales, recogidas en estudios anteriores y en el Seminario de Desarrollo de Voluntariado (2016), es la alta rotación de voluntarios que se presenta en la Cruz Roja. La situación la experimentan la mayoría de SNs en América y en gran medida responde a la falta de estructuras apropiadas y una gestión del voluntariado que promuevan una motivación constante al voluntario.
De los estudios anteriores se recoge que existen dos factores determinantes para la retención de los voluntarios: la capacitación continua y la motivación, ambas áreas en las que a nivel nacional como regional se tiene una deuda pendiente.
La motivación del voluntario puede impulsarse desde el reconocimiento de la labor voluntaria como del otorgamiento de oportunidades para el desarrollo individual. La Cruz Roja debe garantizar a sus voluntarios condiciones óptimas para su servicio voluntario con el fin de evitar las consecuencias obvias de la falta de voluntarios capacitados y motivados. Por tanto, se debe asegurar que los voluntarios también perciban un beneficio individual por la participación voluntaria, el cual puede ser a nivel de desarrollo personal, profesional, académico o de otra índole. Existen, además, herramientas para la autoformación del voluntario puestas a disposición por parte de las Sociedades Nacionales y la Federación Internacional. Los estudios base y estudios anteriores demuestran que no todos los voluntarios conocen o tienen acceso a estas herramientas.
Los voluntarios pueden encontrarse en situaciones de gran vulnerabilidad durante su servicio para la Cruz Roja. Anualmente, se reportan incidentes de voluntarios heridos o que pierden la vida en el desempeño de sus funciones. Es responsabilidad de las Sociedades Nacionales y la Federación minimizar los riesgos para los voluntarios. Diversas herramientas han sido diseñadas para tal fin, entre las que destacan las capacitaciones en temas de seguridad a través de los cursos «Manténgase a Salvo». No obstante, nuestra región todavía tiene una deuda pendiente en capacitaciones y seguros para nuestros voluntarios. Esto debería ser una de las prioridades en la gestión del voluntariado.
Los intercambios entre pares han demostrado ser una herramienta poderosa para la promoción de las buenas prácticas y el intercambio generado a través de la experiencia en la ayuda humanitaria. Los estudios base arrojaron luz sobre esta práctica. Y aunque se ha extendido en los últimos años, no son todas las Sociedades Nacionales las que lo ponen en práctica. La Federación Internacional debe facilitar estos procesos de intercambio de conocimientos e incentivar a las Sociedades Nacionales a que lo hagan.
Hay grandes desafíos institucionales que amenazan el apropiado desarrollo del voluntariado en la Cruz Roja en América. Como organización, es nuestra responsabilidad garantizar la estructura y herramientas necesarias para motivar, proteger y capacitar a nuestros voluntarios. Esta responsabilidad conlleva una revisión constante de la gestión del voluntariado en las SN y en Federación. Generar estudios académicos con estadísticas actualizadas nos permite conocer la composición y estructura del cuerpo de voluntariado y de esta forma entender mejor las necesidades del voluntariado y medir el impacto que tiene nuestra labor en las comunidades y los mismos voluntarios.
Cabe recalcar la importancia que tiene que las Sociedades Nacionales se involucren en los procesos de investigación y diagnóstico que se llevan a cabo desde la Federación, para de esta forma tener datos más representativos y poder acercarse más a la realidad del desarrollo del voluntariado en la región. Es de vital importancia conocer los desafíos y las mejoras que presentas las distintas Sociedades Nacionales desde los distintos países, como un proceso en el que se pueden construir soluciones en conjunto.