Pequeños gestos, grandes cambios: Match sostenible
Cuidar y preservar los recursos naturales es esencial para garantizar un futuro sostenible, y la transición hacia energías renovables es un paso clave en este camino. Los recursos naturales, siendo finitos, se agotan rápidamente debido a su explotación, lo que genera deforestación, contaminación del aire, agua y degradación del suelo. En Bogotá, el Observatorio Ambiental (OAB) monitorea indicadores que reflejan el estado del ambiente y la gestión del Sistema Ambiental del Distrito Capital (SIAC). La adopción de Fuentes No Convencionales de Energía Renovable (FNCER), como paneles solares y generadores eólicos, está transformando la ciudad, con una capacidad instalada que ha evolucionado de 8.8 megavatios en 2020 a 18.8 megavatios en 2021, aunque en 2022 se redujo a 3.1 megavatios. Estos esfuerzos reflejan el compromiso de Bogotá con un futuro energético limpio y sostenible. Este día, la Cruz Roja Colombiana, Seccional Cundinamarca y Bogotá, organizó una actividad educativa sobre energías renovables, enfocándose en cómo su uso preserva los recursos naturales y fomenta una transición energética, con demostraciones prácticas de paneles solares y generadores eólicos. Además, como parte de la Semana Ambiental, el Día 2, titulado «De lineal a circular, ¡cierra el ciclo!», incluyó las actividades de Gratiferia/Ecotrueque/Ecocanje y VerdeSolidario/EcoDona/VerdeDonación/Ecocambio.
Proyectos innovadores están marcando la diferencia en la capital. El Embalse del Muña genera más de 4,000 gigavatios-hora anuales, cubriendo el 8% de la demanda energética nacional y abasteciendo a 2.4 millones de habitantes. Asimismo, el Colegio Ramón Jimeno, con 148 paneles fotovoltaicos, no solo produce energía solar, sino que devuelve el exceso a la red, siendo el primer plantel distrital en recibir el sello verde por eficiencia energética. Otros ejemplos incluyen biodigestores que transforman materia orgánica en biogás y abono, y la promoción de vehículos eléctricos en centros comerciales y sedes administrativas con descuentos y espacios prioritarios.
Esta actividad fomenta la conciencia sobre la importancia de cuidar los recursos naturales a través de acciones cotidianas. Los participantes se vendan los ojos, se apaga la luz para representar la falta de recursos energéticos y se les ensucian las manos para simbolizar la contaminación. A través de esta experiencia inmersiva, se busca generar conciencia sobre la importancia de preservar los recursos naturales.
En esta iniciativa, se promueve el uso responsable de recursos mediante un juego educativo con botellas reutilizables de colores. Los participantes clasificarán las botellas según su material y uso, aprendiendo a identificar opciones sostenibles como el agua embotellada reutilizable frente a las desechables. La actividad busca incentivar hábitos de consumo consciente y la reducción de residuos plásticos, fortaleciendo un enfoque sostenible en la comunidad.
